En general sus piezas se caracterizan por su estilo un tanto primitivo, ero con encanto.
Además de su labor creativa, Esperanza también atendía las tareas del día a día del negocio, junto con su hermana Candida.
La actividad artística de Esperanza Zuloaga solía llamar la atención a los visitantes del taller de San Juan de los Caballeros. Feministas como Beatriz Galindo, Victoria Kent y Margarita Nelken mencionaban a las hermanas Zuloaga como mujeres con carácter, independientes y modernas.
Esperanza murió en Segovia el 15 de abril de 1937.